Aislamiento con Celulosa

CELULOSA


La celulosa es un material natural y renovable que se obtiene a partir de la pulpa de madera reciclada o de papel reciclado.

Este material tiene una amplia gama de aplicaciones, siendo una excelente opción como aislante térmico en edificaciones.

Una vez tratada con sales ignífugas para mejorar su resistencia al fuego, la celulosa se convierte en un aislante térmico altamente eficiente y seguro. Su capacidad para retener el aire en sus fibras la hace ideal para crear una barrera efectiva contra la transferencia de calor, manteniendo los espacios interiores confortables y regulando las temperaturas tanto en verano como en invierno.

Además de sus beneficios en términos de aislamiento térmico, la celulosa también es una opción sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Al utilizar materiales reciclados en su fabricación, ayuda a reducir la cantidad de desechos en los vertederos y contribuye a la conservación de los recursos naturales.

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La celulosa es un material ecológico fabricado a partir de papel reciclado y tratado con sales ignífugas para mejorar su resistencia al fuego.

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Se insufla en las cavidades de las paredes, techos y suelos, formando una capa continua que reduce la transferencia de calor y el ruido.

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Es altamente eficiente en términos de aislamiento térmico y acústico, lo que lo convierte en una opción popular para la mejora de la eficiencia energética en viviendas y edificios comerciales.

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